lunes, 21 de abril de 2014

Empezada y jamás terminada desde hace un siglo...



El amor que irradiaba en la sala era inquietante,  en un instante de silencio Edward Bedford pronuncio apenas unas palabras…
-Es un verdadero placer verte de nuevo Allison…- dijo con una sonrisa de oreja a oreja.
Allison Phorton se sintió incomoda ante las palabras de aquel hombre del cual se había enamorado hace unos años atrás, aquel que tenia frente a frente. Después de unos minutos de observarlo de pies a cabeza, ya que era imposible no mirarlo, con esos ojos trasparentes igualados a dos gotas de agua que irradiaban luz en su rostro, sus hombros anchos, sus brazos fuertes, le recordaron cuando la tomaba en sus brazos. Después de unos segundos solo pudo decir…
-No creo que sea en verdad un verdadero placer…
-Veo que sigues con tus plionismos!- Dijo Edward después de escuchar las palabras de la joven que tenia ante sus ojos.
Allison sintió escalofríos después de escuchar su voz una vez más… lo único que pudo pronunciar fue…
-Veo que al igual tú no cambiaste tu manera de corregir mi gramática… 

Edward sonrió y la observo, llevaba un traje rosa que resaltaba su figura, traía puestos unos zapatos altos, y el pelo recogido. No pudo resistir mirar sus ojos oscuros, le recodaron los momentos que anteriormente había vivido ante aquella mujer que al notar la mirada del susodicho camino hacia la ventana de la habitación.
-Y cuéntame, ¿Qué ha sido de tu vida? No había sabido nada de ti desde que te fuiste…
-No creo que quieras averiguar qué fue lo que me ha pasado… Lo único que te puedo decir es que soy escritor…
-¡Wow escritor! Jamás me imagine que tu, Edward Bedford terminaría redactando historias de su imaginación. Dijo algo sorprendida.
Edward la miro fijamente y dijo…
-Sí, yo tampoco lo imagine, solo se dio, y aproveche el momento, algo que la verdad pensé que solo seria por diversión, pero gracias a ese momento he alcanzado el éxito.
-Éxito?...-Allison se sorprendió al pensar en Edward todo un escritor famoso.
-Si, éxito… He escrito 3 libros, no se si has escuchado hablar sobre “Sorpresas de la vida”. Es mío…-.
Allison puso los ojos como platos. Sorpresas de la vida, el libro que le había llegado al alma. ¿Él lo había escrito? Pero porque diablos nunca le había venido la idea a su cabeza de ver el nombre del autor…
-Ah, si creo que lo he escuchado…- Dijo mintiéndole.
-Pues al parecer ha tenido mucho éxito, y he tenido el crédito por eso…
-Bien por ti…- Comento Allison, tratando de mostrar poco interés, mientras que por dentro se moría de curiosidad por saber que más había sido de el hombre al que había amado más que a ella misma…
- Sigues juzgándome por lo que hice… ¿no?
-¿No debería de ser así?- le espetó Allison.
-Tú sabes exactamente que era mejor irme antes de que ocurriera una tragedia…
-Pudiste habérmelo dicho, pero no, te fuiste así, sin decirle nada a nadie…
-Era lo mejor para los dos… Después de lo que paso, no quería meterte en mas problemas.
-Los problemas vinieron después de que te fuiste.- Dijo Allison con lagrimas en los ojos.
-¿De que estas hablando?- Preguntó Edward.
-Justo después de que te fuiste, mi hermana entro en una depresión total, 2 meses después descubrimos algo que pensamos que nos cambiaria la vida, pero la empeoro mucho mas.
-¿Que paso?

-Descubrimos que Gabriela estaba embarazada de ti…-

Allison pudo recordar la cara de alegría que irradiaba su hermana al enterarse de la noticia.

-No lo puedo creer Ali, un hijo de Edward! Aunque sea tendremos un recuerdo suyo!

Gabriela no sabía nada…


 Edward estaba impactado. Un hijo suyo! Si se hubiera enterado, no hubiera huido y hubiera hecho todo lo que estuviese a su alcance para proteger a ese hijo, aun reprimiendo los sentimientos que sentía por la hermana de la mujer que en ese entonces era su novia…

-Gabriela, donde esta ella…?

-Ella estaba contenta, creía que tener un hijo tuyo seria una manera de recordarte, hasta que de pronto cayó en depresión de nuevo, sabiendo que tu nunca volverías. Eso causo problemas durante el embarazo, y tuvo un parto prematuro....

-Y el niño, ¿Donde está mi hijo?- Dijo Edward con preocupación...


XXXXX


Si, no sé que diablos paso con su hijo. Creo que pudo haber quedado enterrado entre tantos documentos sin terminar.... Suena a novela rosa. :C

domingo, 20 de abril de 2014

Enamorándose...



Yo siempre me enamoraba del chico equivocado. No es como si me hubiera enamorado muchas veces, pero creo que tenía experiencia en eso de ilusionarse y después toparse con un muro indescriptible.
La primera vez que pasó, tenía 13 años. La secundaria era aburrida, monótona y patética. Sentía que le faltaba algo a mi vida, pero todo cambio cuando vi a un chico. Ante esos ojos de niña incrédula, era perfecto. 
 
Siempre había soñado con un chico que tocara guitarra y bam, él lo hacía. Era alto. Delgado. Su cabello oscuro peinado desinteresadamente, pero siempre en su lugar. Una sonrisa de lado, tan sexy. Era bien parecido. Lo malo era que nunca habíamos hablado. Y nunca lo hicimos. Mi amor por él era tan platónico. Como inalcanzable. Vivía con el pensamiento de encontrármelo a cualquier lugar donde iba, acudí a unas reuniones solo porque el iria, pasaba cerca de donde el estaba y hablaba mas fuerte con el fin de que me viera tan si quiera alguna vez. Era tan ingenua. No, era tan patética. Pero el amor te hace cometer ese tipo de horrores.

Está claro que NUNCA ME MIRÓ. Y realmente fue lo mejor. Tiempo después lo conocí, cuando yo ya había logrado superarlo un poco, y digamos que si aun sentía algo de amor por él, se evaporo al instante. Era la persona más horriblemente antipática del mundo. Solo te trataba bien cuando le daba la gana, y era tan superficial y arrogante. Pff… No me quejo de haberlo superado.


Ahora está el siguiente amor, preparatoria.


La preparatoria es considerada por, por lo menos el 89% de la población joven como la mejor etapa de sus vidas. Y sin duda alguna, fue la mía. Ahí conoces los mejores amigos, los que son más probables a ser tus amigos de toda la vida (aunque debo decir que en la universidad también puede pasar eso); las cosas son relajadas; los maestros son exigentes pero no a fin de matarte con tareas y estudios; es la edad perfecta para que tus padres te dejen salir de noche, puedes disfrutar de tu tiempo libre. Oh dios, hay un sinfín de razones que hacen de esta etapa la mejor.

Y también es la mejor etapa para enamorarse. Y como no iba a hacerlo yo. El era un idiota. Bueno, es y creo que siempre lo será. A este si lo conocí, éramos “amigos”, de esos que te molestan, te hartan, te dan ganas de golpearlos contra un árbol o aventarlo del segundo piso de tu colegio. Cuando menos lo pensé, había caído enamorada de el. Me ponía celosa cuando hablaba con otras chicas, me encantaba verlo sonreír, amaba cuando hablaba o respondía las preguntas que hacían los profesores, verlo concentrarse y pensar era simplemente un placer. Más que enamorarme de su físico, me enamore de su intelecto. Su forma de ser. 

Fue un amor un poco más maduro. Dije “un poco”, eh.


Y pues quería llamar su atención. Como cualquier enamoramiento, quieres que esa otra persona te corresponda. Y es difícil que lo haga cuando ya te ha conocido y siguen siendo amigos. Así que habría de haber otra forma para conquistarlo. No quería hartarlo, siendo de esas chicas que son mas prostitutas que coquetas. Así que comencé a buscar las cosas que teníamos en común. Pues teníamos unos gustos en música un poco, parecidos. El era bastante grosero, y yo absolutamente no. Ambos habíamos ido a la misma escuela secundaria. El trauma fue, cuando descubrí que su mejor amigo… era el mismo chico del que me había enamorado en la secundaria. Oh si, el guitarrista. 

Por poco y muero de un infarto o algo parecido. Mejores amigos. Lo que quería decir que había una gran posibilidad de que… Pongámosle un nombre… Jake. Había una gran posibilidad de que muy en el fondo Jake, fuera un superficial engreído igual que su amigo.

Pero cabe decir, que no porque seamos amigos de algunas personas, seremos iguales a ellas. Él no era así. Era peor. Nunca vi que le llamara la atención una chica. Peleaba con un gran grupo de ellas, pero nunca lo vi coquetear con alguna. Eso me dejo desconcertada. Podría ser gay… Eso sería triste.


Decidí investigar un poco más. Comenze a hablarle por chat. Aun por allí era molesto. Pero manteníamos mejores conversaciones que en persona. Digamos que empezamos a hablar hasta altas horas de la madrugada. Lo raro es que en persona todo seguía igual, peleaba conmigo, peleaba con todas. Pero empecé a saber un poco más de su vida. Y comprendí algo realmente importante. Lo que él era en el horario escolar era una total mascara. Porque cuando hablábamos se convertía en una persona diferente, si, me molestaba, pero podíamos hablar seriamente, tontear y no salía con cosas como lo hacía normalmente.


Así que diremos que si antes solo me llamaba la atención o me gustaba, ahora estaba total y perdidamente enamorada de ese idiota.

Continuará…?

Heme aquí.

Hola.
Estos días han sido difíciles para mi. He andado más triste de lo normal. Y pues ya saben, esto de ser mujer y estar triste y sentimental no es nada fácil.
Pero bueno, no me pondré a deprimirlos tambien. :)
Pff...

Me di cuenta de lo mucho que dependía mi vida de Facebook, cuando decidi darme un respiro y desactivar mi cuenta. Es eso de que, tomo el iPod y lo primero que subconcientemente hago es ver mis mensajes en facebook. Lo cual es tragico, porque cada vez que abro la app de messenger, se activa la cuenta y tengo que volver a entrar a desactivarla. -.-
Así que aquí me tienen, con problemas de autocontrol, porque soy una maldita adicta a Facebook. Pero quiero superarlo. Además de alejarme de muchas cosas...
En fiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiin.
Mentí al decirles que estaría aquí más seguido, la verdad me da un poco de pereza escribir en el iPod o encender la computadora. Y pues, son vacaciones. Dejenme :c

Espero esten jodidamente bien (ok, lo siento, me encanta usar esa palabra).
Beban frappuchinos a morir! Son deliciosos. Lo sé. También soy adicta al café :c Me ha superado.
Estaré por aquí. Subire algunas tonterías.

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Ella.

domingo, 13 de abril de 2014

Momentos de desesperación, ah.


Y es que no nos damos cuenta realmente de lo que tenemos. Creemos que estamos rodeados de personas que nos quieren. Pero no nos damos la opción de pensar que realmente no tenemos a nadie más que a nosotros mismos. Nos enfrentamos a este mundo, solos. No tenemos a nadie más. Deberíamos dejar de preocuparnos por lo que piensen los demás y simplemente dejar que nuestros pensamientos nos guíen. Claro está, que debemos estar seguros de que esos pensamientos son buenos. No debes depender nunca de alguien, ese alguien puede fallarte o faltarte un día. ¿Y que harás tu? Echarte a llorar porque ya no está. Suicidarte por el miedo a estar solo. En igual de pensar que es la hora de enfrentarte al mundo por ti mismo. A veces la vida te dará la espalda, pero es ahí el momento en que debes demostrarle a la vida que tú puedes sobrepasarla, luchar contra esos obstáculos que te impiden la vista hacia el futuro que siempre has deseado.

Una loca, loca, perdida...

Hey :)
Sigo viva, al parecer... No había tenido tiempo de venir a importunarlos con mis escritos, pero bueno, aquí estamos!

Ando más desubicada en todo. Ultimamente me la he pasado intentando vivir la vida como debe ser. Ya saben, escuela, dormir, a veces comer, amigos, familia y así. Leo poco, sí escucho musica (creo que por eso sigo viva), no entro a internet... Creo que es como una desintoxicación de tanta tecnología... Claro. A excepción de los libros, me odio por abandonar así la lectura.

Quiero regresar a esto, y como estare de vacaciones durante dos semanas, aqui me tendran, espero un poco mas seguido.


Trataré de inspirarme un poco, o de subir algunas cosas que escribí hace poco. Haber qué sucede. Mientras tanto, espero esten bien y tengan una linda semana!

X

La chica con problemas de personalidad multiple. (Ok, no)